familia Urriza
Otro año que nos animamos
En Marcilla, baila el alma en su danza, en cada calle, revive la esperanza. Benito y Margarita, en la memoria vibran, y desde el cielo, en gozo se miran. No falta esta cita, es sagrada tradición, en nuestro calendario, grabada con pasión. Danzar por Marcilla, es recordar, que en el cielo ellos nos ven celebrar. Cada año, el pueblo se une al compás, susurrando al viento, uniendo su paz. En cada rincón, su espíritu vive, en cada sonrisa, su legado persiste.
Nos lanzamos a las calles de Marcilla, siguiendo la vibrante comparsa del pueblo. Durante el recorrido, nos detuvimos en varias ocasiones para entregarnos al baile y disfrutar de la atmósfera festiva.
Y nos lanzamos a bailar una jota con Estampa Navarra
Aunque el enfoque principal es bailar, también nos tomamos momentos para disfrutar con mis amigos.
Un fin de semana genial
Como siempre, fueron unos días geniales. La jornada anterior disfrutamos de los caballos, y durante todo el fin de semana, de la artesanía y la festividad. Sin duda, el año que viene nos volveremos a ver.
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